La quinoa es uno de los ingredientes de muchos alimentos para perros hoy en día. A menudo se utiliza como sustituto de cereales como el trigo, el maíz y el arroz. Además de ser una fuente de hidratos de carbono complejos, fibra y aminoácidos y ácidos grasos esenciales, la quinoa aporta una serie de vitaminas y minerales. Estas son:
Hierro
Calcio
Cobre
Zinc
Fósforo
Potasio
Magnesio
Manganeso
Vitamina E
Vitaminas B
Los nutrientes esenciales de la quinoa contribuyen a un pelo sano y brillante, a unos dientes y uñas sanos y a unos huesos fuertes. Los nutrientes de la quinoa (y de otros cereales y semillas) ayudan al metabolismo, a los niveles de azúcar en sangre y a la función cerebral, y pueden ser una buena fuente de energía para las actividades diarias.
¿Es la quinoa segura para los perros?
La quinoa está recubierta de una sustancia química natural llamada saponina que la protege de los insectos mientras crece. Esta puede provocar reacciones adversas al comerla, según la Agencia Universitaria DQ. Además, al alimentar a tu perro con un alimento equilibrado, no se recomienda añadir ningún ingrediente adicional, incluida la quinoa, ya que añadirá más calorías y alterará el equilibrio de los nutrientes de la comida. Esto puede provocar problemas de salud con el tiempo.
Algunos perros tienen dificultades digestivas cuando consumen materia vegetal que no ha sido debidamente cocinada. Alimentarles con quinoa puede provocar malestar digestivo y vómitos, diarrea o estreñimiento. Los oxalatos que contienen las plantas también pueden aumentar la inflamación en los perros, lo que podría agravar el dolor en los perros con artritis. Otra cosa que hay que tener en cuenta es que la quinoa suele prepararse con otros ingredientes, como sal, cebolla, judías, carne y especias, que podrían ser perjudiciales para la salud de tu perro. Por esta razón, nunca es una buena idea alimentar a tu perro con quinoa que haya sido preparada para los humanos, ni siquiera una pequeña porción de tu plato.