La tortilla de patata es un plato típico de la cocina española que consiste en una mezcla de huevo y patata. En general, los perros pueden comer tortilla de patata en pequeñas cantidades, siempre que esté bien cocida y no contenga ingredientes dañinos para su salud.
La patata en sí misma no es tóxica para los perros, pero debe estar bien cocida y no debe contener sal, especias u otros ingredientes que puedan ser perjudiciales para su salud. Además, como la tortilla de patata es un alimento rico en grasas y carbohidratos, es importante no darle grandes cantidades a su perro, especialmente si ya tiene sobrepeso o problemas de salud.
En general, la tortilla de patata no debe ser la base de la dieta de su perro, y siempre es recomendable ofrecerle alimentos especialmente formulados para ellos y adaptados a sus necesidades nutricionales. Si tiene dudas, siempre es recomendable hablar con su veterinario para determinar si la tortilla de patata es adecuada para la dieta de su perro.